Veinte años después de la primera Jornada de Gerencia de Proyectos de TI es innegable la importancia y el impacto de los proyectos, como instrumento evolutivo y vehículo de cambio, en el mundo de la tecnología.
Dos décadas pocos imaginaban el potencial y el crecimiento por delante. En el camino aprendimos sobre prácticas duras de gestión, como el control de cambios, la gestión del cronograma, el manejo de los riesgos y la calidad. Y con el tiempo fueron aterrizando conceptos menos técnicos y prácticas más suaves orientadas a la gestión del talento e incluso la felicidad.
El triángulo de hierro – que algunos conocimos como la triple restricción – evolucionó en conceptos más complejos sobre la teoría de restricciones y la contraposición de variables. Más recientemente, la agilidad – o el pensamiento ágil – ha tomado gran espacio en el mundo de la gestión de tecnología y aparecen con ella prácticas y modelos basados en gran parte automatización – como DevOps – o en acelerar el tiempo de obtener valor (TTV) como la gestión Lean del portafolio.
El 2022 es, desde luego, el año en que todos esperamos que finalice la pandemia que fue declarada a inicios del año 2020. Hace un poco más de dos años a la fecha de finalización de este informe. Y con el fin, esperamos una dinámica diferente a la virtualidad – tal vez modelos híbridos de gestión y la incorporación de estructuras organizacionales flexibles orientadas a soportar la virtualidad, los modelos híbridos y la alta rotación de personal.
Este es el quinto informe y con él vemos evidencia que permite validar algunas hipótesis planteadas en informes previos. Como siempre, el objetivo de este informe es dar información útil a directores, gerentes y miembros de equipos de trabajo, y proponer algunas reflexiones sobre nuestra industria y el papel fundamental de la gestión en el éxito de los planes estratégicos de tecnología y muchas organizaciones.
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